El Palacio de la Ópera abre en diez días la Temporada Lírica bajo la batuta de la directora canadiense Keri-Lynn Wilson
El Palacio de la Ópera ultima detalles para el estreno de la nueva Temporada Lírica de este otoño. Los artistas llevan desde el pasado lunes subiéndose a un escenario para practicar lo que serán las dos representaciones de Il Trovatore, que ofrecerán al público los días 3 y 5 de septiembre.
«A partir de ahora será todo ensayar por la mañana y por la tarde. Ayer, sin ir más lejos, se quedaron hasta las once de la noche». Así lo describía César Wonenburguer, director artístico de la temporada, durante uno de los muchos ensayos de esta semana.
Por ahora, las interpretaciones son a media voz y sin luces ni vestuario. Unos trajes que Raúl Asenjo, jefe de producción, explica que pueden ser alquilados a empresas o confeccionados por ellos mismos. En esta ocasión han apostado por la empresa madrileña con la que trabajan series de la talla de Cuéntame o Isabel, pero también se han realizado algunos trajes con las máquinas de dos mujeres que llevan desde finales de los 90 trabajando en el Palacio de la Ópera.
Detalles como estos, son descritos por Asenjo, como «lo más importantes» para que los artistas se fijen en nuestra ciudad y apuesten por actuar en sus instalaciones. «Aquí hay muchos vínculos entre los trabajadores. Hay mucha gente que, pudiendo estar trabajando en películas o en producciones donde se cobra más, prefiere quedarse solo por el ambiente y el trato». No obstante, Asenjo afirma que este es un resultado que obtienen al juntar muchas características. «Por nuestras tablas han pasado artistas con mucho nombre, pero ni siquiera eso atrae tanto como lo hace la Orquesta Sinfónica de Galicia. Somos una ciudad pequeña, con un presupuesto limitado pero con una larga lista de enormes voces». Describe la orquesta, junto a la de Valencia, como la «mejor de España» y asegura que a pesar de no tener la misma incidencia una vez pasada la frontera, «en este pequeño mundillo la conocen todos».
La importancia de este clásico verdiano, que se sitúa en la España de finales del siglo XV, y todo lo que en esta ocasión le acompañará, cuenta con la batuta de la canadiense Keri-Lynn Wilson. A la que se suma el tenor Gregory Kunde, voz de la quinta entrega de la saga Misión Imposible, y el barítono español Juan Jesús Rodríguez. Ambos se juntan en esta interpretación de la novela del dramaturgo español Antonio García Gutiérrez, titulada El Trovador, que sedujo a Verdi desde el primer segundo en que la encontró. La soprano Ángela Meade y una de las principales mezzos de hoy en día, Marianne Cornetti, también están entre los artistas. La única gallega es Alba López, cuya voz fue descubierta en el Ciclo de Nuevas Voces Gallegas.
Las localidades para las dos únicas representaciones programadas de este título, pueden adquirirse hasta el mismo día de las actuaciones a través de abanca.com, en el quiosco ubicado en la plaza de Orense y en la taquilla del Palacio de la Ópera.