Medios nacionales, gallegos y webs musicales lamentan la escasez de ayudas para la Programación Lírica coruñesa, que vuelve a quedar en el último puesto de las subvenciones, pese a la calidad que destacan todos ellos
“La Voz de Galicia”
A Coruña vuelve a estar a la cola en ayudas del Estado a la ópera
Su festival de ópera es el que menos fondos recibe pese a ser el decano
La Voz
A Coruña 28/01/2019 20:05 h
A Coruña, y por lo tanto Galicia, vuelve a quedar relegada a la cola en las aportaciones a la ópera del Ministerio de Cultura, según el proyecto de presupuestos generales del Estado que impulsa el Gobierno de Pedro Sánchez.
Las cuentas contemplan un incrementos de los 75.000 euros anteriores a 120.000 euros, suponiendo que finalmente salgan adelante los presupuestos.
Ese aumento deja a la ciudad muy por detrás del resto de las óperas de ciudades españolas. Madrid Barcelona, Sevilla, Valencia, Bilbao, Oviedo y Las Palmas contarán con más fondos.
Así, el aumento previsto para el liceo de Barcelona es del 2,5 % hasta los 10,4 millones de euros. El Teatro Real recibirá 250.000 euros más, hasta los 9,9 millones. El de la Maestranza de Sevilla disfrutará de un incremento del 34% y recibirá 2,2 millones. El Palau de Les Arts de Valencia contará con un millón de euros gracias a un aumento de 400.000. La Temporada de Ópera de Bilbao recibirá 620.000 euros. La Ópera de Oviedo, 420.000 euros. Finalmente, la Temporada de Ópera de Las Palmas recibirá 250.000 euros del Estado.
La decisión de dejar a A Coruña en la cola se produce a pesar de que la ciudad ha recibido dos premios líricos nacionales: los que concede Opera XXI, la entidad que aglutina a todos los teatros y festivales de ópera de España. Se entregarán el 21 de marzo en el Liceo de Barcelona. Gracias a esos premios se iguala en número de galardones al Teatro Real de Madrid, con dos, premio de honor y mejor cantante. Pese al empate, Madrid recibe del Estado 9,9 millones frente a los 120.000 de la opera coruñesa.
La opera coruñesa cuenta con apoyo del Estado desde el 2009, cuando el entonces ministro de Cultura, César Antonio Molina, decidió reparar un error histórico, e incluyó al Festival de Ópera de A Coruña, decano de los españoles, en las subvenciones nominativas. Se fijó el apoyo en 280.000 euros, que luego fue cayendo hasta 168.000 en el 2012.
Con la llegada del Gobierno del PP, el festival fue apartado de esas ayudas, y obligado a concurrir en el régimen concursal, por una cuantía muy reducida.
En 2016, la anterior directora del INAEM del gobierno del PP, Montserrat Iglesias, tomó nota y A Coruña regresó a las subvenciones nominativas pero por una cuantía inferior, 75.000 euros.
El PSOE de A Coruña y el ex senador Javier Losada, presentaron varias iniciativas para que se regresara a la situación existente con el exministro Molina, pero con nula fortuna.
“ABC”
Cara y cruz en las subvenciones a los teatros de ópera: el Liceo, el más beneficiado; La Coruña, a la cola
El coliseo barcelonés recibe 10,3 millones del Estado en el proyecto de Presupuestos elaborado por el Gobierno, frente a los 9,9 del Real. A la cola, los Amigos de la Ópera coruñeses, galardonados este 2019 con el Premio Nacional de Lírica por la audacia de sus programaciones, con apenas 120.000 euros.
José Luis Jiménez
SeguirSANTIAGOActualizado:30/01/2019 11:45h
No es el teatro lírico con mayor presupuesto, pero sí es el más subvencionado, un año más. El Gran Teatro del Liceo de Barcelona acapara la mayor inyección de fondos públicos en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2019, hasta 10,3 millones de euros del Ministerio de Cultura repartidos en diversas partidas, frente a los 9,9 millones que percibirá el Teatro Real. En la cola, los Amigos de la Ópera de La Coruña, con apenas 120.000 euros, calderilla para una organización sin ánimo de lucro que este mes de mayo recogerá precisamente en el Liceo el Premio Lírico Nacional a la mejor institución como reconocimiento a la audacia en sus programaciones artísticas a pesar de sus raquíticos presupuestos. La «recompensa» del Ministerio es incrementar en 40.000 euros la partida respecto al ejercicio 2018, a expensas de que los Presupuestos se aprueben, un escenario harto improbable, a la vista de la negativa de los socios del Ejecutivo de Pedro Sánchez.
De 2018 a 2019, los principales teatros líricos españoles ven incrementados en mayor o menor medida su participación en el pastel de las subvenciones estatales, con la excepción del Teatro Real, que ve congelada su aportación: 9,9 millones (9,3 de subvención y otros 500.000 euros por la celebración del 200 aniversario). El Liceo, que en 2018 ya fue el más subvencionado con 10,1 millones, incrementa en 200.000 euros su montante total, repartido en diversos capítulos del Presupuesto. El Ministerio divide su aportación entre la Fundación y el Consorcio del Liceu, a través de las transferencias corrientes y las de capital. Los otros dos grandes beneficiados son el Teatro de la Maestranza de Sevilla (de 1,6 a 2,2 millones) y el Palau de Les Arts de Valencia (de 600.000 a 1 millón de euros).
La estructura de ingresos comparada entre Teatro Real y Liceu también arroja algunos datos elocuentes. El escenario madrileño, con un presupuesto aprobado para 2019 de 54,7 millones de euros, solo recibe 14,2 millones de procedencia pública, 10 de origen estatal y los otros 15 repartidos entre Comunidad de Madrid y Ayuntamiento. Apenas representan un 25% del total de sus ingresos. Por su parte, de los 46,5 millones del presupuesto del teatro de la Rambla en la temporada 2017-2018 —las cuentas de la actual no se aprobarán hasta marzo—, casi la mitad fueron fondos públicos. El Estado aportó 10,1 millones frente a los 8 de la Generalitat, los 2,7 del Ayuntamiento de Ada Colau y los 1,6 de la Diputación. La aportación extraordinaria del Estado se explica para sanear la delicada situación financiera del Liceu, que en 2013 estuvo al borde de la suspensión de pagos y que derivó en el rescate de la institución por parte del Gobierno de Rajoy, que aportó de urgencia 4,1 millones de euros.
La Coruña recuerda al exministro Molina
Lejos, muy lejos, quedan los 280.000 euros que en 2008 concedió a los Amigos de la Ópera de La Coruña el entonces ministro de Cultura, César Antonio Molina, que reparaba así el error histórico que había dejado a las temporadas operísticas coruñesas fuera del reparto de subvenciones nominativas. El último presupuesto de aquel Gobierno socialista fue de 168.000 euros. La llegada del PP a la Moncloa expulsó de nuevo a los Amigos de la Ópera del epígrafe de las subvenciones nominativas y les obligó a optar a través de concurrencia competitiva. El resultado fueron 30.000 euros en ayudas, una aportación ridícula para cualquier programador operístico que ansíe un mínimo de calidad.
La última directora general del Inaem bajo la Administración Rajoy, Montserrat Iglesias, corrigió levemente el maltrato a La Coruña y elevó a 75.000 euros la aportación estatal, pero lejos todavía de los máximos de la época del exministro Molina, a pesar de la promesa de equiparar las cantidades a las que se concedían a otras ciudades y asociaciones homologables, como Las Palmas u Oviedo, que en 2018 percibieron 265.000 y 400.000 euros, respectivamente.«Sabemos que hay ahora hay buenas intenciones para recupear la cuentía que en su día fijó César Antonio Molina, pero esos deseos hay que concretarlos, y de momento no ocurre», lamenta la presidenta de Amigos de la Ópera de La Coruña, Natalia Lamas.
El maltrato estatal encuentra un irracional eco en las distintas administraciones gallegas. El ayuntamiento herculino, gobernado por la Marea Atlántica, apenas destinó 80.000 euros a la última programación lírica del pasado año; la Diputación y la Xunta limitaron sus aportaciones a 135.000 euros cada una. «No parece haber disposición por parte de las distintas administraciones de tomarse en serio la ópera en Galicia», denuncia Lamas, «y es una lástima porque los resultados artísticos tienen eco en todas partes».
El último aldabonazo de los Amigos fue la concesión por parte de la asociación Opera XXI —que agrupa a todos los teatros y festivales líricos españoles— del Premio Nacional a la mejor institución, un reconocimiento a una labor condicionada año tras año por los recortes presupuestarios, pero que no ha impedido que por La Coruña pasen artistas de primer nivel internacional como Bryn Terfel, Angela Meade, Gregory Kunde, Mariella Devia, Celso Albelo, Ainhoa Arteta, Juan Jesús Rodríguez, Franco Fagioli o Pretty Yende.
“Codalario”
El Ministerio de Cultura «premia» a una de las mejores direcciones artísticas de España con la peor partida presupuestaria
28 de enero de 2019
El Ministerio de Cultura «premia» a una de las mejores direcciones artísticas de España con la peor partida presupuestaria
Por Aurelio M. Seco
Es difícil de entender, aunque en España ya nos hemos acostumbrado, desgraciadamente, a observar cómo medran y se premia a artistas y gestores mediocres al amparo de los vicios del poder, tanto como se castiga a otros de mayor talento y méritos. Es un mal endémico de nuestro país que se ha extendido hasta campos como el de la educación, donde los criterios para valorar el trabajo de un profesor resultan absurdos y acaban por potenciar al maestro mediocre, relegando a los más interesantes docentes de nuestros sistema educativo y llevándolos a la desilusión e imcomprensión. Ya centrados en el terreno de la ópera, se acaban de hacer públicas las ayudas del Ministerio de Cultura a las diferentes temporadas operísticas españolas y, una vez más, la que quizás pase por ser la más interesante de ellas (la desarrollada en La Coruña por los Amigos de la Ópera), si tenemos que valorar objetivamente los recursos usados y los resultados conseguidos, ha sido castigada con la menor cuantía presupuestaria del conjunto. Tampoco es que se esperase que el presupuesto llegara a alcanzar los de temporadas como los de Las Palmas, Oviedo o Bilbao, pero sí parecía razonable pensar que una dirección tan brillante como la ejercida todos estos años por César Wonenburger en la preciosa ciudad gallega, tuviera una recompensa más acorde al talento y criterio mostrado por este director artístico quien, con muy pocos recursos, ha conseguido vincular a la temporada coruñesa con algunos de los más interesantes artistas del presente, dando como resultado producciones operísticas de gran calidad, e incluso algún hito que pasará a la historia. No entendemos cuál es el criterio usado por el Ministerio de Cultura, a cuyo frente está José Guirao, pero la calidad de las propuestas no es uno de ellos. En La Coruña, «las cuentas contemplan un incremento de los 75.000 euros anteriores a 120.000 euros, suponiendo que finalmente salgan adelante los presupuestos», publica hoy La Voz de Galicia, que también se hace eco del enorme agravio comparativo respecto a las partidas otorgadas a temporadas como la de Oviedo (420.000 euros), Bilbao (620.000 euros), Liceo de Barcelona (10,4 millones de euros), Palacio de la Música de Valencia (1 millón de euros), Maestranza de Sevilla (2,2 millones), Las Palmas (250.000 euros) y Teatro Real (9,9 millones), según información publicada por este medio. Los coruñeses no deberían permanecer impasibles ante esta situación, que no es de justicia.