CULTURA
«O Arame», de Juan Durán, completará un programa doble junto a «El Amor Brujo» de Falla en la NYCO. Este título, estrenado en 2008 en La Coruña, ya se representó en Oxford hace dos veranos
SANTIAGOActualizado:
Juan Durán es uno de los compositores españoles más felices del momento, y eso que asegura haberse enterado de la noticia por la prensa americana, que en los últimos días anunciaba la nueva temporada de la New York City Opera (NYCO). El telón de la segunda compañía más importante de la Gran Manzana se levantará en noviembre con un programa doble en español, el ballet «El Amor Brujo» de Manuel de Falla y la ópera «O Arame», compuesta por Durán en 2006, estrenado en La Coruña dos años después y que está encontrando en los escenarios anglosajones el predicamento del que adolece en nuestro país, ya que una compañía de Oxford ya la representó hace un par de veranos.
«O Arame» tiene una particularidad añadida: es una ópera en gallego que va a marcar otro hito histórico como es el estreno de una obra vocal de un autor español en Nueva York desde que hace más de medio siglo la Metropolitan Opera se atreviera con «La Atlántida» de Manuel de Falla, en su antigua sala filarmónica. Los estrenos neoyorquinos de «La Vida Breve» (1926) o las «Goyescas» de Granados (1916) son incluso anteriores.
Durán no oculta su satisfacción. «Estoy muy contento», admite en conversación con ABC, «están siendo años muy buenos, ahora con “O Arame” pero también con el Premio Reina Sofía de Composición» que recibió en 2018 y con encargos sinfónicos que tiene a corto plazo. Y sin embargo, «creo que no voy a poder asistir al estreno porque en esas mismas fechas me dedican en Las Rozas un concurso de piano y estoy anunciado desde hace un año». Lejos de lamentarse por su más que probable inasistencia, a Durán le parece una buena noticia. «Lo mejor que le puede pasar a una obra es que tenga vida propia y se independice de su autor», asevera, «y en la partitura lo tienen todo, mi presencia no es imprescindible».
La intrahistoria de cómo «O Arame» llega a la mesa de Michael Capasso, director artístico de la NYCO, parte una vez más de los Amigos de la Ópera de La Coruña. Su factótum, César Wonenburger, remitió a su homólogo norteamericano un DVD con la ópera tal y como se representó en la ciudad gallega en 2008, después de que este le trasladara su interés por conocer el título, dentro de la estrategia de la compañía neoyorquina de apostar por obras en español o de autores iberoamericanos, en búsqueda de nuevos públicos. Poco después, la NYCO solicitó a Durán las partituras y particellas de su ópera. «Les envié además el libreto y las indicaciones traducidas al inglés», aunque «O Arame» se representará «en gallego», asegura su compositor. El libreto original es de Manuel Lourenzo, dos veces premio nacional (de Literatura Dramática y de Artes Escénicas).
«Tengo que agradecerle a César Wonenburger su interés y empeño porque “O Arame” esté donde está», subraya Durán, «el grueso de las gestiones para que llegue a Nueva York es suyo, porque a los compositores nos enseñan armonía, contrapunto y análisis de la forma, pero no a promocionar nuestra obra cuando está terminada». El autor no oculta que el formato de «O Arame» («El Alambre», en su traducción al castellano) ayuda para que compañías como la NYCO apuesten por su programación. «Tuve la idea de hacer un formato muy reducido, con una producción que entrara en una furgoneta, y a eso le sumas una historia que es de carácter universal, pues tiene un ámbito de lectura que podría ser en cualquier momento».
La obra narra las desventuras de dos artistas de circo, «dos titiriteros ambulantes», que han llegado a los últimos días de sus vidas y que son los únicos protagonistas de la trama. Además «es una obra cantable», reconoce su ator, «los cantantes no solo no van a sufrir con la línea de canto sino que van a disfrutar de su vocalidad», algo que no siempre ocurre con los títulos de ópera escritos en nuestros días.
Juan Durán ya sabe qué es ver su obra representada fuera de nuestras fronteras. En junio de 2017, la Universidad de Oxford la llevó a escena en coproducción entre el Centro John Rutherford de Estudos Galegos y el Queen’s College. La próxima parada será la New York City Opera. «Pero en España no se volvió a representar desde su estreno en 2008», se lamenta el compositor, «la situación de la ópera actual en español no es buena», y pone como ejemplos los efímeros estrenos de obras de autores nacionales en el Teatro Real. ¿«O Arame» encaja en la programación de un teatro norteamericano y no en La Zarzuela? «Creo que ahí entran en juego variables más allá de los criterios artísticos», apunta, «me temo que la Zarzuela desconoce que existe “O Arame”. Hay tanta música que tenemos que descubrir y redescubrir…».
Ni siquiera el hito neoyorquino le anima a volver a componer otra ópera. «Tengo ideas y bocetos de algún apunte más que podría llevarse a la ópera, pero mientras no tenga petición formal, sin la certeza de que realmente hay la seguridad de que se estrenará, no lo voy a hacer», insiste, «yo no quiero que me queden 16 óperas en un cajón, como a Josep Soler, o a Rogelio Groba, el veterano de los compositores gallegos, que tiene cinco sin estrenar». Mientras llega ese teatro, se refugia en la música sinfónica —tiene un encargo de la SGAE para la Orcam— y en los arreglos del cancionero popular, como los de «Vai lavar a cara» o «Lela», que la mezzo Elina Garanca incluyó en su último trabajo discográfico para Deutsche Grammophon.